martes, 9 de junio de 2009

Cuando el no es la respuesta

Quienes promedien las cuatros décadas como yo, se acordarán muy bien de la serie televisiva de “The Muppets”, ese famoso grupo de amigos compuesto por una rana, una cerdita y otros animalitos que hacían las delicias de nuestras tardes hace casi treinta años.

Un capítulo que aún recuerdo bien es aquel en que “The Muppets” debían presentarse en Hollywood, para hacer una demostración de sus múltiples talentos.

Al mando de aquel viaje estaba como siempre la rana Rene. Cuando llegan a la gran ciudad se encuentran con varios obstáculos que deben pasar para concretar su tan ansiada presentación en la ciudad de las estrellas. Todo el capítulo era acompañado por una canción que hasta hoy recuerdo y que decía “No aceptes un no por respuesta, no aceptes un no por respuesta”...

¿Por que traigo ahora este recuerdo? ¿Qué situación me he llevado a conectar situaciones presentes con otras tan remotas?

He estado meditando mucho sobre las respuestas del Creador a nuestras peticiones. He tratado de encontrar durante un tiempo lógica al obrar de Mi Hacedor. Por supuesto que no he podido y que he sido ganada una vez más por la soberanía de Dios.

Muchas veces cuando enfrentamos situaciones de injusticia, enfermedad o desierto espiritual, tendemos a preguntarnos cuando vendrá El Creador a tomarnos de las manos y sacarnos de la situación que enfrentamos. La mayoría de esas veces queremos con todo nuestro corazón que además de sacarnos del problema nos responda en forma positiva a lo que estamos necesitando.

Allí es cuando con nuestra mente nos dice: “No aceptes un no por respuesta”.

¿Qué sucede cuando nada de esto pasa? ¿Qué sucede cuando el no es la respuesta a tus oraciones? ¿Puedo acaso torcer de alguna manera lo que Dios ha pensado como bueno para mí?

Aunque hoy no entendamos la respuesta de Dios, aunque una vez más te levantes y hagas la misma oración, aunque creas que Dios se confundió con la respuesta, lo cierto que El Creador nunca se equivoca. El puede ver la obra completa de nuestra vida, el puede ver que hay después del puente. Nosotros no.

Los escritos bíblicos registran estas palabras que animaron mi corazón:
“...Y ellos serán mi pueblo y yo seré su Dios. Les daré un corazón y un camino, de tal manera que me teman por siempre, para bien de ellos y de sus hijos después de ellos. Haré con ellos un pacto eterno: que no desistiré de hacerles bien, y pondré mi temor en el corazón de ellos, para que no se aparten de mí.

Para que mi fe aumente, para que mi relación de amistad con Dios se fortalezca y porque en El he encontrado Paz, es que ahora puedo descansar en el NO de Dios.

Los días están transcurriendo y puedo comenzar a comprender...

3 comentarios:

Keila dijo...

Gracias, me gustó mucho y me sirvió aún más.

Eduardo Roldán Reyes dijo...

...He tratado de encontrar durante un tiempo lógica al obrar de Mi Hacedor...

Creo que muchos lo hemos intentado, y pienso que será en vano si usamos solo la razón, por el contrario, siento que es más un asunto del corazón...

Muchas gracias por tu reflexión, y por recordarme a los Muppets¡, saludos.

Jadid dijo...

Me gusto mucho creo que es dificil vivir y estar en contentamiento con los NO de Dios, solo recuerdo a Moises y que mal que él recibio un No al final de su vida pensaría yo, pero me pregunto como se sintio, como descanso y se contento cuando Dios le concedio tantas cosas que le pidio y Dios le dijo SI, como cuando le pidio que le permitiera viera su gloria aunque solo sus espaldas pero para mi fue un SI de Dios, pero hubo mas cosas que le concedio; en mi imaginación pienso que Moises recordo todo lo que Dios le dijo SI, para poder agachar la cabeza e ir no solo animado él sino para animar a otro Josue, cuando a él Dios le había dicho NO pero a Josue le habian dado el SI; creo no solo debo aceptar los NO de Dios sino aun mas estar contento yo para animar a otros que Dios les dijo SI a algo que a mi me dijo NO. No son malos los No de Dios ni buenos los SI, solo son maneras de Dios para ya sea me dijo NO o SI muera mi yo y le refleje mas a él. Esto me ayuda a no ver el bien o el mal sino lo mejor, que siempre esta en Dios.