
Los hijos son la prolongación de la vida, esto no es nuevo.
Mis hijos son tan especiales como lo son los tuyos para vos.
Esto tampoco es nuevo.
Te invito a revivir el tiempo cuando ellos fueron pequeñitos...
Hay un tiempo antes de nacer
Cuando fuimos esperados, amados, imaginados...
Y fue el tiempo de nacer
el más recordado, el más apreciado, el más mostrado.
Hay un tiempo para caminar, para hablar,
para sonreir y hacer reir...
Y fue durante sus primeros años
cuando ellos comenzaron a caminar,
hablar, sonreír y hacer reír.
Hay un tiempo para empezar
a jugar con otros, para compartir,
para tomar solos su merienda.
Para llorar por sus primeras tristezas
o pequeños desencuentros.
Y fue el tiempo del jardín donde ellos aprendieron a compartir,
hacer amigos, hacer sus primeras letras y
y a sorprenderse con historias fantásticas
y mucho más...
Hay un tiempo para
seguir creciendo,
para aprender a escribir y leer,
para sumar y restar, para pensar en su propia conducta
y en la de los demás...
Apenas tienen 6 años.
Y fue en primero cuando ellos se hicieron más grandes,
aprendieron esto y mucho mas.
Hoy mis hijos están grandes,
Y siguen aprendiendo muchas cosas.
Pero sobre todo deseo que ellos
Recuerden siempre:
Respetar para ser respetados.
Escuchar para ser escuchados.
Cumplir las normas de la familia,
escuela o trabajo, porque solo así podremos vivir
en armonía y en sociedad.
Ayudar a otros sin esperar nada a cambio.
A contagiar la alegría que trae consigo cada nuevo día...
CUANDO APARECE EL SOL
1 comentario:
Gracias por recordarme que debo centrarme en cada momento que vivo con ellos. Besos.
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