lunes, 5 de diciembre de 2011

Tiempo de Navidad...

Diciembre...


Un mes muy especial para mí.


Cada año espero con muchas ganas la llegada de la Navidad porque recuerdo y celebro con alegría que Jesús el Hijo de Dios nació. Y es por su nacimiento que tenemos vida y vida eterna y abundante...


Con el correr de los años he celebrado la navidad de diferentes formas porque he tenido en cuenta no solo mis sentimientos sino el de las personas que me rodean.


La navidad no es mágica, pero si Jesús nació en tu corazón como en el mío, ésta puede ser un navidad distinta.


Cada año observo como celebra la navidad las personas que me rodean. También pienso y me pregunto:
¿Cómo espera esta celebración el mundo occidental y cristiano?
¿Tiene alguna razón de ser iluminadas fiestas si no se tiene presente al verdadero motivo de dicha celebración?


Alrededor del mundo es una época donde grandes compras se anuncian por todo tipo de medios de comunicación: regale, aproveche, compre, no espere hasta el último momento, son solo algunos de los slogans que nos empujan a hacer lo que toda la gente hace.

Las reservas en los sitios mas costosos de la ciudad son anotados desde antes del mes de diciembre para cenar la noche de navidad junto a muchos desconocidos. Ni hablar de los viajes a lugares de “ensueño” para recordar el nacimiento del Hijo de Dios...


Sin duda alguna el tiempo de Navidad es la época más esperada por todos los cristianos alrededor del mundo. Recordar y celebrar el nacimiento de Jesús trae inmensa alegría y despierta sentimientos de bondad en quienes reconocen en ese acontecimiento la venida del Salvador a nuestra tierra.

Como hace mas de dos mil años, estos son días para proclamar “Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz, buena voluntad para con los hombres”.

Cuando Jesús nació no fue entre cámaras de televisión ni trasmitido a todo el mundo por el espacio virtual, pero el cielo, miles de ángeles y humildes pastores contemplaron el instante en que el Salvador abría sus ojos para depositar su vista en vos y en mí.

La promesa de Dios se cumplió en la persona de Jesucristo, aquella noche en Belén: Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz.(Isaías 9:6)

Somos conmovidos por el amor incomparable de Dios al enviar a su propio Hijo por amor ha todos nosotros. Dios el Creador de todo lo que vemos cuando elevamos nuestra vista al cielo ha puesto sus ojos en nosotros para extender un puente hacia un mundo que lo necesita.

Ante este hecho tan transcendente: ¿Cómo te preparas para celebrar la Navidad este año?¿Qué cosas son importantes al momento de pensar en la víspera de navidad?¿En dónde deberíamos poner los cristianos nuestro corazón durante estos días?

Como familias con o sin hijos; mayores o muy jóvenes, las formas para transitar estos días suelen ser similares según la cultura y la tradición de nuestro país o muy distintas si nos vamos de un continente a otro.

Pero hay una luz brillante que nos distingue de gran parte de la humanidad y es hecho ser hijos de Dios, y esa sola razón le da a nuestro entorno una motivación diferente para celebrar la navidad dado que nuestro corazón está puesto en el único que merece ser reconocido ese día y es Jesús.

Estamos a comienzos de mes. Te animo a pensar con todo tu corazón como celebrar este año este tiempo especial de navidad.

1 comentario:

Isa dijo...

¡Hola, Gaby! Muy lindo tu post y muy emotivo. Siempre me ha gustado la época de la navidad porque es una época de dar regalos y no sólo en recibirlos aunque sí me llegan, pero siempre me ha gustado dar, así que es una muy buena ocasión para llevar a cabo.
Que la pases feliz con tu familia en esta época.
Bendiciones!!!!!