lunes, 27 de septiembre de 2010

Septiembre 27

Hermoso nombre para una película, ¿verdad?

La trama podría ser el primer día de una situación muy esperada.
El último día de un trabajo desagradable.
El día esperado para un viaje.
El día en que recuerdo haber conocido a una persona especial.
La fecha de nacimiento de un hijo o hasta un nieto.
En fin, y la lista puede seguir…

¿Qué tiene de especial este día?
¿Qué hizo que reparara en él y no en otro?

En realidad todos los días son especiales para mí.

Este es tan especial como el de ayer y seguramente como lo será mañana.

Pero me gusto decir: Septiembre 27.

Y elijo el título de “mi” película.

Septiembre 27, vuelvo a empezar.

Vuelvo a empezar este día en la seguridad de que Dios está conmigo, pues su amor y misericordia se renuevan cada día…

Vuelvo a empezar este día con la vista puesta en Dios, pues cuando lo miro a Él se refleja en mí su bondad, su ternura y su compasión. Sentimientos o actitudes muy importantes para relacionarme con mis seres queridos y aun con desconocidos…

Vuelvo a empezar este día con la alegría que me produce respirar el aroma de algunas flores, mirar los árboles que poco a poco muestran sus brotes, sentir ya la primavera, pero por sobre todo recordar las palabras del Creador: “Quiero que haya en el cielo luces que separen el día de la noche, luces que indiquen las estaciones, los días y los años, luces en el cielo azul que iluminen la tierra...

Vuelvo empezar este día disfrutando este momento, pero esperando el día de mañana que con seguridad será tan especial como el de hoy…

1 comentario:

Isa dijo...

Muy interesante tu post mi querida Gaby y mucho para reflexionar sobre lo que dices. Me has puesto ha pensar en que cada día que vivo, debo de vivirlo de tal manera, tocando cosas importantes, haciendo y dando lo mejor de mí, mi sonrisa, una palabra amable, porque quizá, ya no tendré otro día de parte de Dios para realizar su obra,así que este día...¡es especial!
Excelente post.
Besitos.